Si algo ha cambiado la fisonomía de nuestras ciudades es, sin duda, el ascensor. ¡Y qué incómodos son los edificios de varias plantas que no cuentan con uno de ellos! Es evidente que son una parte esencial de los pisos, siendo los responsables de darles accesibilidad. Pero, por parte de los usuarios, deberíamos tener en cuenta que el respeto y el civismo en el ascensor son cruciales para mantener un ambiente seguro y agradable en el vecindario.

Porque a nadie le gusta que su ascensor esté continuamente averiado, ¿no? Existen unas normas, que no tan solo mejoran la experiencia de viaje, sino que también contribuyen a conservar, de la mejor manera posible, este tipo de máquinas para los usuarios.

13 consejos de civismo cuando utilizas el ascensor

Con un toque es suficiente. Cuando necesites llamar al ascensor, recuerda que solo hace falta que pulses una vez el botón. Hacerlo en repetidas ocasiones no acelerará su llegada. En cambio, si esperas pacientemente, el ascensor responderá sin ningún problema.

Botón de apertura de puertas. ¡No se te ocurra forzarlas! Si estás dentro del ascensor y deseas mantener las puertas abiertas para permitir que alguien entre, utiliza siempre el botón. Forzar las puertas puede ser peligroso y dañino para el funcionamiento del ascensor.

 

Inelsa Zener - Civismo en el ascensor

Imagen: freepik.es


 

Cuida los espacios comunes. Recuerda que el ascensor es una extensión de tu hogar. Respeta el espacio de todos. Evita arrojar basura al suelo o ensuciar los cristales. Son pequeños gestos como estos los que contribuyen a un ambiente más agradable para todos los usuarios.

Asegúrate de que las puertas se cierran correctamente. Antes de que el ascensor comience su recorrido, fíjate de que las puertas estén bien cerradas. Si lo hicieran de forma incorrecta, impedirían que el ascensor se moviese, lo que afectaría a la eficiencia y la disponibilidad del resto de usuarios.

Sé cortés con las personas de movilidad reducida. Si ves a alguien que necesite usar el ascensor, cede el paso y dales preferencia. Un pequeño acto de amabilidad puede hacer que su día sea mejor. No cuesta nada ser amable.

Deja salir antes de entrar en la cabina. Permite que las personas salgan del ascensor antes de intentar entrar. Parece que sea un simple gesto, pero se consigue fomentar un flujo más suave y ordenado de usuarios.

Cuida el interior de tu ascensor si hay obras en el edificio. Asegúrate de cubrir las áreas de la cabina para evitar daño.

Respeta la carga máxima. Cada ascensor tiene un tope de capacidad que no se debe sobrepasar nunca. Asegúrate de no excederla, ya que podría ser peligroso, afectando a su funcionamiento.

Cuida el cuarto de máquinas. No es un Trastero. Respeta ese espacio, porque si colocas objetos puedes llegar a dificultar el trabajo de los técnicos y causar daños a las máquinas, lo que afectaría a la seguridad de todos.

 

Inelsa Zener - Civismo en el ascensor

Imagen: freepik.es


 

Evita comportamientos peligrosos e incívicos. No golpees ni saltes en el ascensor. Puedes poner en riesgo tanto la estructura como su funcionamiento y, lo que es peor, poner también a los usuarios en peligro.

Cuida todos los elementos del ascensor. Evita dañar la botonera u otros elementos que puedas encontrar en su interior. Mantén el ascensor en buen estado. Solo así conseguirás alargar al máximo su vida útil.

No fumes dentro de la cabina. Respeta tanto a tus vecinos como a la normativa, al no fumar en el ascensor. El tabaco puede afectar de manera negativa la experiencia de los otros usuarios.

No tires basura al foso. Mantenlo limpio y libre de colillas. Evitarás que aumente el riesgo de incendio y, de paso, también la necesidad de realizar limpiezas extras.

Si sigues estos 13 consejos de civismo en el ascensor, conseguirás que todos los usuarios pueden disfrutar de una experiencia mucho más agradable y segura.

Para una mejor convivencia, es vital el respeto hacia los demás y el cuidado del espacio compartido. Solo así se conseguirá un buen ambiente entre los vecinos de cualquier edificio.