Para cualquier persona con movilidad reducida, independientemente de la edad que tenga, el hecho de subir o bajar escalera se puede llegar a convertir en un verdadero suplicio. Sabemos que España es uno de los países europeos con el porcentaje más alto de habitantes que viven en comunidades de vecinos. No en vano somos el país con más ascensores por habitante del mundo. De todas formas, cada vez son más aquellos que prefieren vivir en casas unifamiliares o chalets de diferentes alturas, y donde la instalación de un salvaescaleras o un pequeño ascensor puede hacer la vida mucho más sencilla. Si este es tu caso, y no sabes por cuál de las dos opciones deberías decantarte, no dejes de leer este artículo con el que queremos sacarte de dudas.

Ascensor o salvescaleras: esta es la cuestión.

Ya se sabe que, cuando pensamos en un par de opciones que nos interesan a la hora de realizar cualquier tipo de cambio en nuestros hogares, uno de los factores que hacen que nos inclinemos hacia una o la otra, es el precio. Evidentemente sabemos que el importe es mayor si instalamos un ascensor en nuestro hogar, aunque adelantamos que no tanto como nos puede llegar a parecer a priori, que colocar un salvaescaleras. Dicho esto, ¿cuál de estas dos máquinas sería la más adecuada en tu caso?

– Si nos fijamos en el importe, debemos tener en cuenta que un ascensor es una inversión, y al final de las obras acabamos compensando el gasto con la revalorización de la vivienda.

– Estéticamente es mucho más bonito un ascensor doméstico que una silla salvaescaleras. Además, en Inelsa Zener contamos con diferentes opciones a la hora de combinar los materiales (madera, acero inoxidable, cristal,…), creando un ambiente único y personal.

– Si bien es cierto que los ascensores domésticos son más pequeños que los convencionales, y que actualmente se pueden instalar sin necesidad de foso ni cuarto de máquinas, no tenemos que olvidar que necesitamos un lugar que probablemente no tengamos, o que no nos guste usar. En este sentido los salvaescaleras realizan la misma función sin necesidad de ocupar mucho espacio. Debemos tener en cuenta que la mayoría se pliega cuando no está en uso, para poder subir y bajar a pie, con toda comodidad, las escaleras.

– Por otro lado, si lo que nos preocupa es la inmediatez, la instalación de un salvaescaleras es muchísimo más rápida que la de un ascensor, incluso aunque necesitemos adaptar la silla o la plataforma a un tramo de escaleras curvo. En este último caso, el diseño de todo el conjunto se tendría que hacer a medida tardando su montaje algo más que si este fuese recto. En el supuesto que quisiéramos instalar un ascensor doméstico, las obras podrían llegar a durar mucho más, a excepción de los ascensores de vacío que se montan por módulos. En la mayoría de las ocasiones se tiene que realizar cambios en la casa, necesitando el asesoramiento de un arquitecto y un contratista, eso sin contar con el montaje del elevador en sí.

En resumen, un salvaescaleras es mucho más económico y puede instalarse en un breve espacio de tiempo, pero este tipo de aparato no nos da la personalidad ni el retorno de la inversión que nos puede llegar a dar un homelift. Si necesitas hacer tu hogar accesible en un corto espacio de tiempo, esa puede llegar a ser la mejor opción, pero si deseas una experiencia única en tu hogar, y que tu inversión se revalorice, no lo pienses más y ubica en tu casa un ascensor doméstico.

Dicen que cada casa es un mundo, y aquí la frase va como anillo al dedo. Cada uno tenemos diferentes necesidades, así que no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Nuestros compañeros te informarán de cuál es el sistema que se puede adaptar mejor a ti. En Inelsa Zener fabricamos e instalamos salvaescaleras de plataforma y silla, así como también todo tipo de ascensores. Llámanos y te ayudaremos a decidirte.